Qué es y qué no es la monogamia

Se puede encontrar bastante fácil una crítica liberal a la monogamia, desde el punto de vista del individuo. Ese punto de vista puede ser desde el más puro hedonismo o desde la "responsabilidad afectiva". Acá desarrollo otro punto de vista.

Para las personas que lean esto y sean monógamas

Este artículo no es para juzgarte a vos ni a tus relaciones ni a tu estilo de vida. Es mi experiencia que la gente con pensamiento social crítico y en relaciones monogámicas se siente "corrida por izquierda" ante la crítica de la monogamia. No quiero que pase eso.

Mi crítica es a la institución de la monogamia por el Estado. Porque esa es la razón que veo detrás de la hegemonía de la monogamia como modelo relacional (y, por lo tanto, la marginación de otros modelos relacionales). Quiero destruir esa hegemonía y eso no es un ataque a las parejas monogámicas en sí,  tampoco a la monogamia como idea, tampoco a las personas que tengan o anhelen una relación monogámica. Así como la crítica de la heteronorma no es un rechazo o descalificación de la heterosexualidad, simplemente una afirmación de que hay otras sexualidades aparte de la heterosexual y las personas que las viven quieren dejar de estar marginadas. Quiero contribuir a impulsar un movimiento por la des-marginalización de las relaciones no-monogámicas y de las personas que las practican. 

¿Qué es la monogamia?

Acá puede venir lo polémico porque entramos en el aspecto teórico del asunto y sé que lo siguiente chocará con las teorías/creencias de otra gente, posiblemente vos que estás leyendo.

La monogamia no es una elección libre por parte de todos los individuos. Puede serla para algunos, pero no para todos. Los individuos somos diversos, ¿por qué todos elegiríamos lo mismo? Si una "libre elección" es siempre la misma para todo el mundo entonces hay que desconfiar del "libre". Hay una hegemonía ahí, y por lo tanto una marginación de otras opciones.

La monogamia no es lo natural para todo el mundo. Si la monogamia fuera tan natural en nosotros como en los pingüinos, no harían falta leyes que la refuercen y que castiguen las transgresiones a ella. No hubiera sido necesario que las potencias europeas, en su conquista de otros continentes, impusieran la monogamia a las poblaciones nativas (junto con la subordinación de las mujeres a los hombres, la religión cristiana, la propiedad privada, y otras relaciones sociales). ¿La monogamia es natural en los humanos? Sí. También lo es la no-monogamia. Para algunas personas ser monógamas es lo natural y para otras no. Así como para algunas personas ser heterosexuales es lo natural y para otras no.

La monogamia no es una simple costumbre conservadora. Este es uno de los errores frecuentes en la crítica superficial (liberal) a la monogamia. Significa creer que la hegemonía de la monogamia es culpa de ideas conservadoras y/o de ciertas religiones, entonces con "abrir la cabeza" ya está. Primero, lo dicho arriba: hay individuos que son naturalmente monógamos, ellos no tienen por qué cambiar nada. Segundo, incluso aunque las personas cambien sus ideas acerca de la no-monogamia, lo más difícil es cambiar de prácticas. Y cuando esas prácticas se relacionan con normas sociales, esto incluso tiene una dosis de peligro para el individuo. No se transgreden las normas sociales sin pagar un precio. Sino pregúntenle a la gente LGBT en entornos heteronormativos. Decirle a la persona que no está conforme con la monogamia que se anime y "salga del clóset" es bastante irresponsable si no se hace nada por crear un ambiente social más amigable con la diversidad relacional.

La monogamia no es un subproducto del patriarcado. Se ha vinculado al patriarcado la imposición institucional y cultural de la monogamia como una forma de restringir la libertad sexual de las poblaciones (en especial de las mujeres). También son patriarcales o al menos machistas los dobles estándares monógamos para hombres y mujeres. A este respecto, el movimiento feminista y el LGBT han protagonizado en el siglo pasado y en lo que va de éste importantes luchas por convertir al matrimonio en un contrato entre dos adultos libres, y hacerlo accesible para cualquier pareja, no solo las conformadas por un varón y una mujer. Los resultados de estas luchas van desde el derecho al divorcio hasta la reforma del matrimonio para que sea entre dos personas, independientemente del sexo/género que tengan. Quienes minimicen estos cambios revolucionarios desde una postura maximalista, harían bien en comparar las posibilidades de una mujer actual con las de su abuela. El próximo paso es que el matrimonio pueda ser entre dos o más personas.

El amor se expresa de muchas formas

A veces el meme de la pareja monogámica con un "amor verdadero", donde ambas personas se siguen eligiendo con el pasar de los años, es cierto. Eso es hermoso y no quiero que sea atacado. De la misma manera, deseo que las historias hermosas de parejas abiertas y de relaciones amorosas de más de dos personas tengan la misma estima. Porque si logramos poner a un costado el morbo por el aspecto sexual, veremos que alcanzan el mismo nivel de ternura y compromiso que las parejas monogámicas, y que también son capaces de crear entornos amorosos y seguros para la crianza.

La capacidad de amar del ser humano es algo hermoso y que da esperanza, y debería valorarse en todas sus expresiones. Así como se ha logrado una mayor aceptación de la homosexualidad y la bisexualidad resaltando que el amor entre dos personas es el mismo independientemente del sexo que tengan, tenemos que lograr una mayor aceptación de las relaciones amorosas de más de dos, resaltando que el amor que se tienen es el mismo, y que amar intensamente a dos o más personas no sólo es posible sino que sucede. Esta es una decisión ética que podés tomar incluso siendo una persona monogámica. 

Así como hubo personas heterosexuales que apoyaron la reforma del matrimonio en favor de la gente LGBT, las personas monogámicas pueden apoyar una reforma del matrimonio en favor de la gente no-monogámica.

Hay una segunda parte de este escrito donde hablo sobre la ética relacional.

Algunas fuentes recomendadas

La crítica del amor romántico que hacen autoras como Coral Herrera Gómez (con su propuesta del amor compañero) y la crítica de la monogamia de Brigitte Vasallo (con su propuesta del poliamor) es muy buena y muy necesaria. También el libro Ética amatoria del deseo libertario, de Ludditas Sexuales, que puede bajarse en pdf aquí.