Peronismo y fascismo

Cuando empezás a darte cuenta de todas las similitudes entre peronismo y fascismo esto provee una explicación mucho más completa y coherente del comportamiento peronista que el reduccionismo de la hipocresía y la simple ignorancia.

Su fanatismo no es una excepción. Su anticomunismo (que hoy se expresa en antitroskismo) no es secundario. Su sumisión a la conducción o a la jerarquía de turno no es un accidente. Son fascistas. El peronismo es el fascismo argentino. No esperen campos de concentración y desfiles militares para llamar a algo fascismo, eso era la moda en el fascismo de aquel contexto. Un fascismo que nunca sufrió una derrora militar tuvo el tiempo más que suficiente para aggiornarse a la derrota del Eje y adaptarse a los mecanismos de la república.

El núcleo del fascismo es el mismo. Fusión de Nación, Pueblo, Líder y Movimiento. Todo el que sea contrario (o crítico) al Movimiento es antipatria y antipueblo, merece un estigma. La lealtad es un valor más importante que la inteligencia, la justicia, el esfuerzo o la sinceridad. El poder legislativo y el judicial tienen que subordinarse al ejecutivo. El líder y las masas tienen que tener comunicación directa para que aparte de su dominación racional-legal pueda ejercer una dominación carismática. Los derechos son algo que el Líder o el "gobierno popular" DA, y por los cuales hay que agradecer. Desprecio a la intelectualidad, salvo cuando ésta es servil.

Ese es el legado que los políticos peronistas han mantenido intacto luego de la muerte del general pedófilo. Algunos más ortodoxos (Moreno, La Batalla Cultural) y otros más moderados (Alberto). Algunos más celestes (Manzur, Magario) y otros más "zurdos" (Axel, Ofelia). En el momento decisivo cierran filas. No hay contradicciones entre el palo y la zanahoria. Sirven al mismo fin.

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